Adrián Ghiglione, exjugador de Logaritmo, y actualmente subdirector de Recreación y Deportes, comentó la importante de la elección de Rosario como sede del próximo Mundial Juvenil U20. Las obras en el Hipódromo son parte del legado que le quedará a la ciudad tras el evento.
— ¿Qué significa para la ciudad la designación para ser sede del Mundial Juvenil 2019?
— Para nosotros es muy importante, porque sumamos un evento internacional más, como la provincia de Santa Fe viene haciendo hace un tiempo. El fin de semana pasado tuvimos la visita de Gales (frente a Los Pumas), la semana que viene comienza el Mundial M17 de Básquet, y también están los Juegos Sudamericano de Playa. Para nosotros, en una ciudad donde es tan importante el rugby, volver a recibir el Mundial M20 como hicimos en el 2010 es gratificante, sobre todo por el legado que deja a la ciudad en cuanto a que muchos más chicos, con la difusión, verán rugby y pueden motivarse a jugar. Es importante que los chicos de Rosario comiencen a jugar al rugby. Esto lo van a aprovechar los clubes para engrosar sus filas en cantidad de jugadores, y segundo por un legado de la infraestructura, en esta oportunidad salimos del estadio de fútbol y vamos a presentar dos estadios, uno en Old Resian-donde el club ha hecho un esfuerzo muy importante para mejorar su infraestructura-, y el Hipódromo, con una cancha de césped sintético. Será la primera vez que se juegue un Mundial en esta superficie.
— ¿Cuáles son los objetivos del municipio en promover este tipo de eventos?
— Son las excusas para generar la infraestructura deportiva que le falta a la ciudad. Con el Mundial de Básquet se pusieron en valor los cuatro vestuarios que estaban en uno de los túneles, que desde 1982 no funcionaban, y a partir de esto va a hacerlo. Y con el rugby va a quedar una cancha de césped sintético para que la usen todos. Tratamos de apoyar a todos los deportes por igual, aunque no es lineal, ya que la posibilidad de traer un mundial es un incentivo. Estamos convencidos que Rosario tiene una buena base deportiva basada en sus clubes y en sus dirigentes y por eso es fácil traer eventos internacionales. Entonces cuando uno crea la infraestructura no queda como un elefante blanco, sino que ayuda a los clubes.
«Rosario tiene una buena base deportiva basada en sus clubes y en sus dirigentes»
— ¿Cuáles son las obras dentro del óvalo del Hipódromo?
—Es en el marco de un proyecto para construir un Centro de Alto Rendimiento en la ciudad de Rosario y de la decisión del gobierno provincial de dotar de una infraestructura nueva al Instituto de Educación Física de Rosario. En este contexto, a través de una sinergia de esfuerzos de la provincia y el municipio, se llevarán adelante obras tales como la construcción de una cancha de césped sintético de hockey y otra de rugby, como también una de fútbol, un gimnasio, la cobertura del micro estadio del patinódromo y un centro acuático para la federación de natación. La instalación del césped sintético deberá ser avalada por la World Rugby para que pueden jugarse los partidos de este evento internacional y que luego esta obra sea uno de los legados que le quede a la ciudad. Esta cancha podrá ser utilizada posteriormente por los distintos seleccionados de Rosario como así también por algunos clubes. Tener una cancha de césped sintético siempre está bueno, descomprime y ayuda a la infraestructura no sólo de los seleccionados sino también de los clubes. Esto último lo vemos como un trabajo en conjunto con la Unión de Rugby de Rosario y la Municipalidad.
— ¿La ciudad se posicionó como un polo de atracción para eventos deportivos internacionales?
— Si, ciudades como Córdoba, Mar de Plata, Santa Fe, pueden recibir este tipo de evento porque brindan una plaza hotelera y gastronómica. La gente que viene a ver el evento puede llenar el resto del tiempo recorriendo la ciudad, y Rosario tiene espacios culturales importantes. Pero todo esto se puede hacer, no sólo por estas cuestiones, sino porque hay gente capacitada para llevarlo adelante.
— ¿En qué estado están las obras en el Hipódromo?
— El campo de juego, la cancha en sí está terminado. Habíamos tenido un retraso porque para tirarle la arena especial que va arriba necesitábamos una ventana de 10 días sin llover. Eso se terminó la semana pasada, y el túnel está en los últimos detalles. Nos queda pendiente, calculamos que comenzaremos en noviembre y terminaremos en los primeros meses del 2019, los vestuarios que tienen que estar terminado antes del inicio. Estamos viendo cual es la mejor estructura para dejarle al Hipódromo, tampoco queremos que queden grandes estructuras que después no se le de uso. La idea es complementarlos con estructuras desarmables.
— Con respecto a las tribunas: ¿Qué capacidad tendrán?
— Serán desmontables y calculamos, según lo que hablamos con la Unión Argentina de Rugby, es que haya una capacidad para 10 mil personas. Creemos, en base a que hay dos sedes y más de 20 partidos, esta es la capacidad idónea para albergar la demanda.