Nicolás Vergallo retornó a las 4 hectáreas. El medio scrum, tras su paso por el rugby internacional, volvió al club que lo formó, el Jockey de Rosario. Allí hizo su debut en primera en el 2004, y jugó el Litoral hasta 2008 cuando emigró a Francia. Este sábado juega su primer partido amistoso de preparación para el certamen regional.
Tras emigrar, su primer contacto con el rugby profesional fue en Francia con el Dax, luego pasó al Stade Toulousain. También participó del Super Rugby, de hecho fue el primer rosarino de jugar en ese torneo. Al ser consultado sobre sus perspectivas, Vergallo dijo: “La principal expectativa que tengo es divertirme, tengo ganas de que el rugby vuelva a ser un placer, porque el último tiempo era más una obligación”, y ahondó: “Y ese fue uno de los principales motivos por los que dejé de jugar profesionalmente”.
“Lo que más extrañé fue la vida de club, jugar con amigos, entrenar, hacer bromas en el mismo idioma. Son todas cosas que uno no se da cuenta al principio y al final lo vas extrañando bastante. Tengo muchas ganas de poder jugar en cancha 1 del club, que me venga a ver mi familia y mis amigos. Es todo una mezcla de sensaciones pero la verdad que por ahora lo estoy disfrutando muchísimo”, graficó.
Tras 11 años fuera del país, Vergallo tiene la idea de quedarse en la ciudad. “No sé qué me depara el futuro, pero estamos con ganas con mi familia de radicarnos acá”, expresó el ex medio scrum de los Pumas.
Con sólo 35 años, Vergallo, ha jugado en Union Sportive Daquoise, Stade Toulousain, Southern Kings, Tarbes y Lyon de la Pro D2. También supo vestir la camiseta del seleccionado de la Unión de Rugby de Rosario.
El jugador del Jockey Club, estuvo terciando para ser parte del plantel que viajó al Mundial de Francia 2007, pero fue desafectado a último momento, aunque la revancha llegaría con la convocatoria para el Mundial de Nueva Zelanda en 2011. En su paso por el rugby profesional compartió equipo con jugadores de la talla de Sebastien Chabal, Ricky Januarie y Juan Manuel Leguizamón. Ahora es el turno de volver a vestir la verdiblanca.
